jueves, 23 de agosto de 2012

Lo hice

Resultó que no fue con mi familia.
Tampoco con mis amigos.
Ni siquiera en soledad.

No sé por qué.

Sólo sé que al final tú me abriste de nuevo al mostrarme tanta belleza en uno de los mejores fines de semana de este verano.

Lo hice, delante de ti.

Me avergoncé, pero afirmabas que no pasaba nada. Y me abrazaste durante varios segundos hasta que me calmé.

Eres de verdad una buena amiga. Y contigo siento que puedo relajarme, bajar la guardia y confiar de verdad.

Contigo vi playas preciosas de agua cristalina. Menudo regalo para la vista, el tacto y, por qué no, el alma. Comimos en un acantilado dónde se podía apreciar el nido de ciertas aves que descansaba entre rocas y árboles. Desperezarse con un abrazo es realmente una buena sensación matutina. Diferentes pueblos, mucha natura, castillos, historias de miedo reales, humor y cariño. Compartir en definitiva todo un finde.

Me alegro sinceramente de habernos visto, y de TODO lo que me regalaste. Me diste además la fuerza suficiente como para acabar dignamente con una relación que hacía meses se había ido pudriendo. Ambos notábamos el olor pero ninguno nos atrevíamos a mirar.

Sí, creo que aún la echo de menos. Pero sé que no habría podido ser de otro modo y que definitivamente no congeniábamos. Qué engañados nos teníamos.

Ahora tengo otra estrella que me guía de lejos aparte de la mía propia.

También he notado la perdida de "mi playa personificada" y ese también ha sido un golpe no muy fácil ni agradable de digerir.

La soledad va pesando, pero como ahora tengo más fuerzas gracias a ti, Sara, creo que la puedo levantar sin demasiados problemas, arrojarla  a un lado y seguir mi camino.

Gracias sinceras por tu amistad.


P.S.: He absorbido las puas xD
Un abrazo de varios segundos... Gor, Elghor

No hay comentarios: